DE REBAJAS (II): MEJORAR Y AMPLIAR TU FONDO DE ARMARIO

Cualquier excusa es buena para crear o ampliar lo que los estilistas conocen como “fondo de armario”. ¡Y las rebajas son la mejor excusa para hacerlo! (y la más económica).

El fondo de armario es un conjunto de prendas básicas con las que puedes triunfar de día o de noche. ¡Es lo mínimo que deberías llevar en cualquier maleta! Tienen que ser prendas de calidad y que te sienten bien, porque te tienen que durar mucho tiempo y van a ser muy utilizadas. La idea del fondo de armario es que se amortice mucho: que todas las prendas que lo compongan tengan un uso casi constante por separado, juntas o combinadas con otras prendas.

El fondo de armario básico se compone de:

Un vestido negro de cóctel: también llamado litle black dress o petite robe noir. Debe ser discreto, corto y de un tejido de entretiempo para que pueda ponerse en verano y en invierno. Es un verdadero comodín: de día, de tarde y de noche.

Unos jeans: también llamados tejanos o vaqueros.  Mejor en el color clásico, el azul. Evitar los jeans de camal muy anch0  (pantalones campana) o muy estrecho (pitillos extraelásticos) y elegir un modelo de camal recto que favorece a todo el mundo.







Una camisa blanca: mejor de manga larga (una camisa de manga corta en invierno queda rara…¡y pasas frío!) y de un tejido no muy grueso para poder utilizarla sola o encima o debajo de otras prendas (por ejemplo con una chaqueta encima o con una camiseta de tirantes y blonda debajo)

Un buen bolso: de un modelo clásico, a ser posible de piel y en uno de los colores más combinables (negro, marrón chocolate o color cuero). De tamaño intermedio, tiene que servir para el día y para la noche.

Unos zapatos de tacón: los llamados “salones”, con puntera ni afilada ni cuadrada ni  completamente redonda y con tacón, aunque no de aguja (es un básico que te pondrás mucho y debes ir cómoda). Como el bolso, los zapatos han de ser de un color combinable.

Un par de camisetas de algodón: de manga corta y con una goma discreta en el cuello. Mejor si son un poco ajustadas y en colores neutros: blanco, negro, gris o beige (nada de incluir otros colores que se vean demasiado y se recuerden muy bien si los repites mucho). Nada de estampados ni mantras escritos en las camisetas (del tipo “I’m a princess”, “Be happy” o similares), han de ser lisas.

Mira cuál de estas prendas falta en tu armario y cuál está ya tan viejecita que hay que renovarla. Aprovecha las rebajas, compra lo que necesites y ¡no olvides contarme cómo ha quedado tu perfecto fondo de armario!