28 de enero de 2011

COMPRA UNA SOLA COSA EN REBAJAS: LITTLE BLACK DRESS (LBD)

(Esta semana he estado un poco inactiva así que, para disculparme, aquí os dejo este post que es un poco largo pero que espero que os compense)

El primero, y fundamental, de toooooodos los básicos de aquélla que quiera salir airosa en cualquier situación es un vestido corto negro (petite robe noir O LBD). Vamos, un clásico vestido de cóctel negro. ¡Sirve desde por la mañana hasta por la noche con sólo cambiarle cuatro detallitos! Que tienes una entrevista de trabajo, le añades un foulard discreto y un maquillaje suave. Que tu suegra te invita a comer, le pones una cinta de raso y unas botas de caña. Que te invita a cenar ése maromo estupendo que pensabas que jamás te invitaría, te sueltas el pelo, te pones unos collares de cadena XXL, unos taconazos, y… ¡a la guerra!
Evidentemente, hay un montón de vestidos negros esperando a que los compres y posiblemente no todos te sienten igual de bien. Con escote redondo, en V, de tirantes, con manga francesa, sin mangas, de manga larga… y de mil y una formas: tubo, recto, acampanado, plisado…Aunque el negro siempre estiliza, hay que tener algunas cosas claras antes de lanzarse al gasto. Además de escoger un vestido acorde con tu personalidad, hay que escoger uno que te favorezca. Es una verdad de Perogrullo, pero hay que recordarla porque a veces acabamos comprando ese vestido que tan fantásticamente le sienta a mi amiga (pero que a mí me hace parecer un botijo, incluso sin serlo). Por ejemplo:
  • Si tienes una cadera ancha, evita los cortes acampanados o parecerás una mesa camilla.  Si tienes mucho pecho, tiende a los escotes en V , lo disimularán.
  • Si lo mejor de tu anatomía no son tus piernas, opta por una falda tubo a la rodilla para no verte un par de columnas jónicas sobre los zapatos.
  • Si tienes unos brazos y unos hombros bonitos, atrévete con el palabra de honor o con un corte helénico.
  • Si eres de constitución muy delgada, olvida los cortes ajustados, tipo funda, para no parecer un insecto palo.
Recuerda que se trata de destacar lo que tienes bonito (que seguro que es mucho) y disimular aquello que no quieres que se note. ¡Ah! Y nunca olvides la consigna básica: “menos es más”. Por mucho que te parezca que el vestido es soso, no te pases con los complementos. No se trata de ir de árbol de navidad. Escoge un complemento en el que quieras que los demás se fijen y coordina todo el resto del conjunto sobre él teniendo como base tu petite robe noir.
Aquí te dejo diez propuestas, que espero que te sirvan. Yo he encontrado todos estos estilos en tiendas como Zara, H&M, Sfera, Blanco, Mango, Stradivarius o Pull&Bear, entre otras. Escoge tu estilo y ¡adáptalo a ti! ¡Y no olvides contarme lo impresionante que estabas! 
 
  • Informal: apto para casi cualquier tipo de mujer, excepto para las más delgadas a quienes no favorece porque no potencia las curvas. Hasta sin complementos resulta perfecto. El escote barco potencia los hombros y el cuello, por lo que es mejor llevar el pelo recogido.
  • Chic: no favorece si tienes el cuello corto o papada. Si tienes los brazos rellenitos, decántate por una versión en manga corta o en manga japonesa. Ponle complementos atrevidos y nunca un moño bajo y zapato plano o parecerás la señorita Rottenmeier.
  • Práctico: es seductor y cómodo. Si le añades unos grandes pendientes y un maquillaje de noche, es perfecto para cualquier fiesta o cena. Si tienes poco pecho, decántate por otro tipo de escote que no sea en V. Si tu cadera es ancha, baja el fajín, no te interesa marcar la cintura.
  • Sofisticado: No apto para las que no presumen de brazos. Si tienes mucho pecho asegúrate de que el vestido tiene incorporadas ballenas (alambres de sujeción) o te pasarás el día y la noche pensando “palabra de honor que… sí que se me cae…”. Si quieres darle más informalidad, compleméntalo con un maxicardigan de punto.
  • Nocturno: El escote asimétrico reduce volumen y da altura. Sienta bien a casi todos los tipos. Si el vestido no es entallado, ojo con parecer un fantasma con la sábana atada al hombro. Si quieres darle más alegría, dale volumen a tu pelo y despéinate.
  • Clásico: Fácil de encontrar en cualquier parte. De punto, de crêpe, o de seda, es el verdadero comodín. Las únicas que no pueden disfrutar de él son las que tienen hombros y brazos anchos y musculados, tipo nadadora, ya que les estrecha la cadera y amplía aún más los hombros.
  • Sobrio: Otro comodín que se puede poner solo o con leggings. No obstante, ¡cuidadito con él! No se trata de parecerse a la abuela del yogur griego…Puede echarte muchos años encima si no lo complementas con algo atrevido. Unas medias de rejilla o de colores, unos pendientes llamativos o unos botines de tacón bastan para modernizarlo.
  • Divertido: Una propuesta para las más delgadas. Los escotes cuadrados y las faldas con volumen hacen aparecer curvas donde no las hay. Complementado con una cazadora de cuero te dará un aspecto más rockero, y con una rebequitq de punto obtendrás una imagen dulce.
  • Sexy: ¡Todas deberíamos ponernos uno de éstos por lo menos una vez en la vida! Con más o menos escote, si le añades unos cuantos collares disimularás tanto si tienes pecho como si no. Para el día ponte una camiseta palabra de honor o de tirantes debajo, le dará seriedad.
  • Helénico: Buena elección para aquellas que no tienen marcada la cintura o para las más delgadas. Cuidado con los plisados porque aumentan el volumen, especialmente si las franjas del plisado son anchas.

2 comentarios:

  1. sin dar envidia a nadie me hice uno yo misma muy sencillito, eso si cone stas fotos me das ideas para hacer otro. jeje

    y que razon tiens te sacan de cualquier aprieto con unos buenos accesorios, eso si, sin calcetos blancos, jeje

    ResponderEliminar
  2. ¡Pues sí que da envidia que sepas coser! Algunas a duras penas sabemos enhebrar una aguja... ¡Ya me contarás si haces otro siguiendo alguna de las ideas!

    ResponderEliminar