Voy
a cuestionar al bolso Lady Dior, que nació en 1994, y que recibe
su nombre en homenaje a la fallecida Princesa Diana que lo lució en diversas ocasiones
y que lo convirtió en referencia de la Maison Dior. Vale, me voy a meter con un
it bag. Voy a polemizar sobre un icono. ¡Buffff! ¡Qué presión!...
El
Lady Dior es un clásico atemporal, eso no hay quien lo discuta. Sobre todo en su versión acolchada en piel
de becerro negra, que me encanta. Muchas mataríamos por un Lady Dior. ¿O no…?
Porque hay una versión del mítico Lady Dior por la que no sé si mataría, ni siquiera
sé si me pelearía por ella… Os la enseño, para que entendáis por qué me ha dado un chispazo al verla...
Es
una versión del clásico pero sin acolchar y con un dégradé que va del azul
eléctrico al violeta pasando por el verde musgo. No dudo que es de lo más
combinable y reconozco que me gustan los colores brillantes, pero es que no sé…
Que tanto colorín junto en un clásico atemporal me ha echado para atrás. ¿Qué
os parece? A mí no me convence del todo…
Pues no está nada mal, a lo mejor el degradado no ha sido demasiado acertado pero no hace daño a la vista...
ResponderEliminar.Estelle.
Estoy contigo, Estelle, es un sí pero no... Jajajaja
EliminarBsssssssss Estelle
Doler no duele...pero no me acaba de convencer a mí tampoco!
ResponderEliminarNo duele, pero ni fu ni fa, ¿verdad Pantufla? ;)
EliminarBssssssssssss